¿Qué tan frecuente incluyes verdolaga en tu día a día? ¿Has probado alguna vez cocinar con hojas de diente de león o sabías que de la flor del banano se puede realizar una nutritiva ensalada?
Probablemente no, ya que éstas y otras plantas comestibles han ido quedando olvidadas en la cocina boliviana contemporánea. Sin embargo, estos tesoros ocultos de la agrobiodiversidad nacional esconden un potencial nutricional y gastronómico que merece ser redescubierto y revalorizado.
En un mundo donde el ritmo de vida se acelera y las elecciones alimenticias se simplifican, la diabetes viene posicionándose como un problema de salud global, afectando a millones de personas, incluyendo a muchos bolivianos.
“La diabetes es una de las enfermedades más comunes en Bolivia, debido a varios factores, como la falta de educación sobre hábitos saludables, la alimentación poco equilibrada y la falta de acceso a servicios de salud preventivos. Además, los cambios en el estilo de vida y la urbanización también han contribuido al aumento de los casos de diabetes en el país”, afirma Patricia Cabaleiro, docente de medicina en Unifranz Santa Cruz.
Esté artículo busca promover y compartir información sobre plantas alimenticias no convencionales, no se especializa en las propiedades medicinales de las plantas, sino en su potencial gastronómico.
¿Qué son las PANCS?
La sigla PANC significa Plantas Alimenticias No Convencionales. En otras palabras, se refiere a todas las plantas que podríamos consumir, pero no consumimos ya sea porque no se encuentran en los mercados, porque se ha ido dejando de lado sus propiedades alimenticias.
Puedes ver el video completo en su canal de youtube.
La sigla «PANC» fue acuñada por el botánico, profesor e investigador Valdely Ferreira Kinupp en su tesis de doctorado en fitotecnia por la Universidad de Río Grande del Sur, Brasil, en 2014. Valdely ha ayudado a popularizar el consumo de estas plantas o partes de plantas, que pueden utilizarse como alimento, pero son poco conocidas o escasamente utilizadas por la mayor parte de la población, sobre todo en nuestros centros urbanos.
¿Toda hierba es una PANC?
No, necesariamente, existen diversas plantas que crecen espontáneamente en plazas, aceras, jardines o huertos y no son comestibles. Lo que no significa que no tengan utilidad – son fuente de refugio y alimento para diversos insectos y animales, y ayudan al equilibrio del medio ambiente.
El término «PANC» depende con quién hables y en qué región te encuentres. Por ejemplo, las plantas amazónicas pueden no ser convencionales para alguien del oriente, pero no convencionales para alguien del lado occidente andino, o viceversa.
Un caso específico es el de la “mangaba”, que es bastante conocida en la región de Chiquitos. Allí no se considera una PANC, pero podría serlo para quienes viven en La Paz o Potosí. O bien, en el caso del «Amañoque» que es un tubérculo bastante consumido en Potosí, o regiones occidentales; mas para la región del occidente, es un tubérculo desconocido.
Con el tiempo, a medida que su uso se difunda, puede que esta planta sea reconocida, cultivada y comercializada, dejando de ser considerada como PANC para convertirse en parte habitual de la dieta local.
Las PANC deben relacionarse con lo que el entorno local puede ofrecer. El objetivo no es importar alimentos lejanos, sino aprovechar al máximo lo que está disponible en cada región. En todo el país hay un gran potencial para explorar las plantas alimenticias no convencionales, ya sean nativas o de otras partes del mundo, que se han adaptado muy bien a nuestro territorio boliviano.
Beneficios de las PANC
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la inclusión de Plantas Alimenticias No Convencionales en el menú, emerge como una posibilidad para diversificar la dieta humana.
“Cuanto más variada es la dieta, más nutrientes se ingieren. Además, el cambio climático afectará al cultivo de las especies más consumidas. Las PANCS podrían erigirse como una alternativa frente a este escenario”, argumenta la etnobotánica Patrícia Muniz de Medeiros, de la Universidad Federal de Alagoas (UFAL)
Además, las PANC tienen un bajo impacto ambiental y se adaptan fácilmente a diversas condiciones. Históricamente, estas plantas formaron parte integral de nuestra cultura alimentaria local. Su consumo no solo contribuye a una alimentación más sostenible, sino que también representa un rescate de las costumbres culinarias de generaciones pasadas, recordándonos los platos que disfrutaban nuestros abuelos.
Diversidad de PANC en Bolivia
¿Cómo consumirlas?
El consumo de Plantas Alimenticias No Convencionales (PANC) está respaldado por una serie de investigaciones científicas que demuestran no solo su seguridad, sino también sus valiosas propiedades nutricionales.
Muchas de estas plantas, que son poco utilizadas en Bolivia, gozan de gran reconocimiento en otras partes del mundo. Por ejemplo, la quinua se utiliza como un sustituto del frecuente arroz, mientras que la papa morada y el yacón son ingredientes populares en la preparación de postres en Perú y en otras partes del mundo.
Esta diversidad de usos resalta la creatividad y la cultura necesarias para integrar estas especies en nuestra alimentación cotidiana, fomentando así una dieta más variada y nutritiva en nuestro contexto.
Cada planta es un ingrediente con sus propias peculiaridades y formas de consumo. En general, se clasifican en tres formas de preparación:
• Plantas que se consumen crudas, en forma de jugo o ensalada. Consumo similar al del apio, la lechuga y el pepino.
• Plantas que se pueden consumir tanto crudas como procesadas, pero que resultan más agradables y sabrosas cuando se cocinan o se saltean. Misma forma de preparación que el repollo, zanahoria y pimentón.
• Plantas que necesariamente deben pasar por un proceso de cocción. Este requisito es similar al de la yuca, el camote y la berenjena, que deben consumirse cocidas.
Es importante conocer las características de cada planta para poder prepararlas de manera adecuada y así aprovechar al máximo sus propiedades y beneficios.
Recomendaciones para consumir PANCs
Antes de consumir Plantas Alimenticias No Convencionales (PANC), es importante tener en cuenta algunas recomendaciones, ya que no todas las plantas son comestibles y pueden ser tóxicas para el organismo. Entre los principales cuidados a tener en cuenta están:
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- Identificar correctamente la planta, se recomienda esperar a la floración.
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- Obtener las plantas de fuentes confiables: evitar recolectarlas en áreas contaminadas, como carreteras y vías de tráfico
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- Prepararlas adecuadamente, especialmente en el proceso de cocción
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- Consumirlas con moderación
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- No ofrecer las plantas a personas con condiciones médicas o específicas
Conclusión
En conclusión, adoptar una dieta que incluya estas plantas implica abrirse a nuevos sabores y redescubrir aquellos que han caído en el olvido. Incorporarlas no solo diversifica nuestras opciones culinarias, sino que también contribuye a una alimentación más equilibrada y saludable, alineada con prácticas responsables hacia nuestro entorno.
Puesto que el cultivo de éstas Plantas Alimenticias, por parte de los agricultores no solo optimiza el uso de tierras antes improductivas, sino que gracias a sus diferentes requisitos estacionales, las PANC proporcionan una mayor diversidad de alimentos, haciéndolos menos susceptibles a las variaciones climáticas.
El enfoque actual no garantiza la seguridad alimentaria y puede tener graves repercusiones económicas y ambientales. Las PANC emergen como un recurso vital que conecta a las comunidades con su entorno, fomenta la economía local y recupera saberes tradicionales que fortalecen la resiliencia.
Finalmente, es fundamental reconsiderar lo que desechamos en nuestra cocina. Así como no deberíamos descartar las raíces y hojas del yacón, que son igualmente nutritivas, tampoco debemos ignorar las partes menos convencionales de otras verduras, como las flores del plátano. Promover el consumo de estas partes comestibles no solo ayuda a reducir el desperdicio, sino que también nos permite disfrutar de sabores ricos en nutrientes y de la diversidad que las Plantas Alimenticias No Convencionales pueden ofrecer.
La revalorización de las PANC es, por lo tanto, un paso esencial hacia una alimentación más consciente y sostenible. ¿Cuál es la planta alimenticia no convencional que más te gustaría probar? ¿Qué opinas sobre la importancia de recuperar saberes tradicionales en nuestra alimentación? ¿Tienes alguna historia que contar?
Recursos adicionales
Enlaces a organizaciones y agrupaciones relevantes sobre PANC en Latinoamérica, junto a la bibliografía usada para este artículo.